En el invierno de 1913, un periódico británico publicó un anuncio para promover la última expedición imperial a la Antártida, que aparentemente puso el explorador polar, Ernest Shackleton. El anuncio decía: "Se necesita hombres para viaje peligroso. Salarios bajos, frío extremo y muchas horas de oscuridad completa. Regreso seguro, no garantizado. Honor y reconocimiento en caso de éxito". Si bien el anuncio podría ser erróneo, no lo es la naturaleza peligrosa del viaje al Polo Sur, tal y como lo pudieron comprobar exploradores como Roald Amundsen, Robert Falcon Scott y el mismo Shackleton, cuando intentaron ser los primeros hombres en alcanzarlo.

En septiembre de 2010, lanzamos las primeras imágenes de la Antártida en Street View, gracias a las cuales los usuarios de tierras más habitables pudieron ver pingüinos en la Antártida por primera vez. Hoy te ofrecemos más imágenes panorámicas de ubicaciones históricas de este lugar que puedes disfrutar desde la comodidad de tu casa. Publicaremos esta colección especial en la página web de World Wonders Project, donde podrás obtener más información sobre la historia de la exploración del Polo Sur. 

   

Con la ayuda del Centro geoespacial polar de la Universidad de Minnesota y el Antarctic Heritage Trust de Nueva Zelanda, hemos ampliado nuestras imágenes de 360 grados del continente y estamos poniendo a disposición del público de todo el mundo imágenes de muchos otros sitios importantes como el Telescopio del Polo Sur, la Cabaña de Shackleton, la Cabaña de Scott y la Pingüinera de pingüinos Adelia en Cabo Royds.



El interior de la cabaña de Shackleton permite reconocer los artículos que se utilizaban para las expediciones a la Antártida a principios del s. XX. Todo está perfectamente ordenado en su interior. 

Con esta tecnología se puede entrar en sitios como la cabaña de Shackleton (en la foto anterior) y en las demás pequeñas construcciones de madera que sirvieron de base desde las cuales los exploradores comenzaron sus expediciones. Se construyeron para resistir las drásticas condiciones meteorológicas y solo para los pocos años en los que los exploradores las habitaron pero, sorprendentemente, transcurrido un siglo, estas estructuras siguen intactas, así como ejemplos bien conservados de alimentos, medicinas, artículos y equipamiento de supervivencia que se usaron durante las expediciones. Ahora, todo el mundo puede adentrarse en estas cabañas y ver cómo vivían estos hombres durante meses.



Esta imagen muestra la desolación del paisaje que rodea la cabaña de provisiones de Robert Falcon Scott. Para estos primeros exploradores las cabañas de provisiones eran un oasis de calor y comodidad en un entorno frío e inhóspito.

Estas nuevas imágenes se captaron con una cámara ligera sobre trípode con ojo de pez, el equipo que usamos habitualmente para capturar las imágenes de interiores de negocios a través del programa Business Photos. Utilizamos esta tecnología por su portabilidad, fiabilidad y facilidad de uso (nuestras bicicletas de Street View no serían muy útiles en la nieve). 

El objetivo de esta dedicación es proporcionar a los científicos y a viajeros entusiastas (o a amantes de los pingüinos) de todo el mundo, datos de alta resolución y más precisos de estos importantes lugares históricos. Con este acceso, los alumnos de sitios tan alejados como Bangalore pueden contar colonias de pingüinos de la Isla Cerro Nevado, y los geólogos de Georgia pueden localizar capas sedimentarias en los valles secos de la Antártida. Así que, olvídate de las botas y de los guantes, y embárcate en un viaje a la Antártida.